Un poco de historia de los refranes

Cuántas veces hemos escuchado esos proverbios de personas mayores y jóvenes, es increíble como hay gente que los repita aún sin saber el porqué de su origen, existe una cantidad de ellos en nuestro país y se creó una página que recopila si no todos, gran parte de los refranes de España, si hay algún interés en ello, solo visiten el siguiente enlace www.refranesysusignificado.net, están listados por categoría y al seleccionar alguno sale con su respectivo significado.

La página, es una recopilación de este tipo de proverbios, es rico en cultura, vale la pena visitarla y saber el significado de cada uno de ellos. Los refranes han sido de uso común. Muchos nacen de las observaciones y experiencias del día, suministran riqueza a la cultura de los pueblo porque fueron heredadas de nuestros antepasados.

El refrán forma parte de las costumbres de los pobladores, son sentencias cortas que expresan la sabiduría del pueblo, la recolección de ellos es lo que se llama refranero y es tan importante darlo a conocer a nuestros jóvenes para mantener esa cultura en el tiempo y no se pierda. Se debe mostrar lo divertido que es entender el significado. A continuación mostramos unos ejemplos para incentivar la curiosidad:

  • “El que fue a Sevilla, perdió su silla”, este proverbio data del reinado de Enrique IV, cuentan que un sobrino del arzobispo de Sevilla fue designado arzobispo de Compostela, pero el arzobispo pensaba que el sobrino no iba a poder soportar las revueltas en Galicia y se ofreció ir para allanarle el camino, dejándole encargado del puesto en Sevilla.

Cuando regresa, la sorpresa, resultó que el sobrino no quería entregarle el control del mismo alegando que el trato era permanente. De allí nació el refrán y el significado es que un tercero se apropia de un bien por distracción del dueño.

  • “A Dios rogando y con el mazo dando”, cuentan que un hombre se le dañó el coche que llevaba cargado, estaba en un camino solitario y vió a San Bernardo, de inmediato le rogó al santo para que lo ayudara y él le respondió, yo le ruego a Dios, tú le das con el mazo. De allí nace el dicho, indica que cuando pedimos ayuda también debemos esforzarnos por lograr lo que se quiere.

El refrán es el resultado de observar los problemas y el comportamiento diario del ser humano, de ellos se extrae una enseñanza. El visitar la página atraerá la curiosidad y entrará al mundo de la cultura refranera.

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