Cómo elegir la mejor cuna para mi bebé

La cuna es una de las inversiones más importantes a la hora de comprar el mobiliario y los accesorios para nuestro bebé. Los niños duermen en la cuna aproximadamente hasta los tres años, por lo que es conveniente elegirla concienzudamente.

Principalmente debe ser cómoda y segura, por ello debe cumplir con las siguientes normas de seguridad:

Somier

Tiene que tener una altura interior de 30 centímetros en la posición más alta y 60 en la más baja.

Barandilla

Los barrotes de la barandilla deben tener una separación entre 4,5  y 6,5 centímetros y la altura mínima ha de ser de 55 centímetros. Asegúrate de que no hay clavos o elementos peligrosos que puedan engancharse con la ropa del bebé o que se encuentren a su alcance. Asimismo, comprueba que la distancia entre la barandilla y el colchón no es de más de dos dedos.

Colchón

A pesar de que el colchón no viene incluido con la cuna, se suele comprar de forma conjunta. Mientras que las cunas pueden ser heredadas o prestadas, no es recomendable que el colchón lo sea ya que puede haber sido comprimido en determinadas zonas por el peso del anterior bebé y por tanto resultar menos efectivo.Además, procura que esté formado por materiales transpirables, que permitan la circulación del aire y eviten que el bebé sude acumulando humedad que pueda generar ácaros y bacterias.

Asegúrate de que encajar perfectamente con las medidas de la cuna, las medidas interiores suelen ser las siguientes:

  • 150 cm x 79 cm
  • 140 cm x 70 cm
  • 125 cm x 62 cm
  • 120 cm x 60 cm

Pintura

Los bebés no solo tocan los barrotes de la cuna, sino que en ocasiones también los chupan, por eso la pintura y barnices deben ser atóxicos para asegurar la seguridad de los más pequeños.

Consejos en la utilización de la cuna

  • No la coloques junto a una ventana ya que además de entrar frío, las cortinas pueden ser utilizadas por el pequeño para trepar.
  • No la sitúes junto al radiador. El exceso de calor puede ser peligroso.
  • Deja fuera del alcance los productos de higiene, lámparas, elementos decorativos, etc. Cuando los niños consiguen ponerse de pie o de rodillas tienen al alcance de su mano objetos que pueden ser peligrosos.
  • No optes por protectores impermeables, elige aquellos que permitan la circulación del aire.

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