Irse de vacaciones, tomarse unos días de reposo y relax, debe ser algo que, caso de que podamos hacerlo, debemos hacerlo. A poco que tengamos un tanto de dinero ahorrado del que podamos prescindir, consideramos que deberías tener a mano ciertos destinos para gozar, y los tuyos, y poder desconectar de la rutina diaria.
Imagínate la escena: el rumor de las aguas te acorruca con efecto balsámico. La claridad de exactamente las mismas, que te deja ver el fondo marino, es pasmante. La temperatura es ideal, la arena muy, muy fina, el cielo de un azul mediterráneo muy propio y la limpieza de la plaza es absoluta. Si bien parezca algo imposible de hallar actualmente, lo es cierto que este pequeño paraíso existe, y además de esto lo tenemos en nuestro país: cualquiera de las playas de nuestro litoral levantino.
Gozar de su tiempo, de sus playas, de sus calas reservadas y vacías, es una experiencia que se puede vivir intensamente en cualquier provincia mediterránea. Y puesto que solos peninsulares, para esto es muy aconsejable usar un vehículo (turismo, ciclomotor, moto, etcétera) al objeto de tener movilidad y acceder sin inconvenientes a esos lugares que visitamos el año pasado y que tanto nos agradaron. Para esto es preciso tener en consideración ciertas cuestiones que, si son ignoradas, podrían transformar nuestras vacaciones en algo paranormal.
Por servirnos de un ejemplo, si viajarás con tu vehículo es necesario que te asegures de haber pasado la ITV en tiempo y forma y de tenerlo bien revisado, en todos y cada uno de los sistemas. Y si algo falla no olvides que hay páginas exclusivas en la Red de redes que te dejan adquirir motor de segunda mano a una caja de cambios, una bomba inyectora, etcétera De esta manera no va a haber inconvenientes en el momento de ir de un lugar a otro.
¿Has comprobado que los niveles de tu vehículo están en su lugar? El aceite, el líquido de frenos, el de la dirección automática o bien la batería son elementos sencillamente comprobables que puedes administrar de manera cómoda y autónoma. Si una dejadez en el mantenimiento de tu vehículo te deja tirado en una carretera peninsular a absolutamente nadie vas a poder inculpar, únicamente a ti. Conque tómate un tiempo para hacer esas comprobaciones.
Para finalizar, echa una ojeada a los elementos obligatorios y recomendables que todo vehículo debe llevar: chaleco, triángulos, gato, llave para aflojar las ruedas, etcétera ¿Te imaginas que pinchas y que no puedes mudar un neumático por el hecho de que se te ha olvidado la herramienta precisa? Menuda situación, especialmente si en el vehículo viajan tu suegra, tu mujer o bien las dos. Con lo que no despiertes su ira y, ya antes de viajar a un destino fantástico y también idílico de este país, verifica y comprueba tu coche. No te marchas a arrepentir.